martes, 2 de noviembre de 2010

Descuidos que hacen peligrar el planeta

La noticia es de hace varios años, pero estas cosas siguen ocurriendo.

1-¿Qué estamos haciendo con nuestra casa?

Brasil, Río de Janeiro:

Anthony Garotinho, gobernador del estado de Río de Janeiro habló con respecto al hundimiento de la plataforma petrolera de la empresa Petrobras.
Datos y Cifras:
Se considera la misma explotará al llegar a los 1000 metros de profundidad.
Esta explosión derramará 1.500.000 (un millón y medio) de litros de combustible.
La plataforma, considerada la mayor del mundo, tiene 120 metros de altura (como un edificio de 40 pisos) y pesa 32.000 toneladas.
Comenzó a hundirse hace algunas semanas luego de 3 explosiones que provocaron la muerte de 10 operarios.
El efecto de la presión del agua sobre los depósitos de combustible genera que 1.200.000 litros de diesel y 300.000 litros de petróleo derramen su fatídica presencia en las aguas del océano Atlántico, con la consecuencia todavía impredecible sobre especies naturales.
Se piensa también que las barreras colocadas por 26 barcos en la zona no son eficientes para evitar que la mancha avance. Las corrientes marinas y el oleaje pueden llevar este siniestro líquido hacia cualquier parte incluso puede aparecer en lugares inesperados.

2-¿Qué estamos haciendo con nuestra casa?

Es decir, qué estamos haciendo con el planeta, o, dicho de otra forma, qué no estamos haciendo por el planeta.
Pocas veces nos ponemos a pensar en el mundo como nuestro hogar. La mayoría de nosotros, por no decir todos, consideramos como nuestra casa al lugar donde vivimos, domicilio, localidad, ciudad, país.
En realidad, podríamos decir que solamente pensamos en casa o en hogar cuando se trata de nuestro propio domicilio, a juzgar por el desprecio y la desidia con que tratamos los espacios públicos, las calles, las veredas, volcando en ellas cuanto residuo esté a nuestra disposición.
En nuestro país, ya nadie se asombra de ver como se arrojan en cualquier lugar papeles, latas, boletos de colectivo, vidrios y todo tipo de deshecho, sin ningún pudor, por hablar de la contaminación en menor escala.
Por supuesto, no falta la otra contaminación, la de las fábricas y empresas que vuelcan sus líquidos y residuos tóxicos en los ríos. Esta costumbre, mala y dañina por cierto, nos habla a las claras de la falta de interés por mantener limpio un lugar que en definitiva es de todos.
Cuando salgo a la calle, cuando utilizo un medio de transporte, cuando estoy en un parque, estoy también en mi casa; este sitio es en ese momento el lugar donde vivo.

¿Cuanto más difícil será que tomemos conciencia de que el mundo, el planeta, es el lugar donde vivimos?
¿Por qué no comparar al planeta con nuestra propia casa?
Qué grande sería nuestro empeño por evitar, por ejemplo, que se derrame aceite en la pileta de natación. Con cuánto cuidado trataríamos de proteger a nuestras plantas favoritas del contacto con combustibles, nafta, etc.
¿Cuál sería nuestra actitud si el tanque de agua se contaminara con venenos y tuviéramos que prescindir de usar la instalación de agua potable de la casa?


Llevando estas comparaciones a lo que sucede en el mundo, con nuestra Tierra, con nuestro Hogar:
¿Por qué no pensamos en la vida que albergan los océanos?
¿Por qué no ponemos más cuidado en proteger las pocas y cada vez menores reservas que la naturaleza nos ha brindado?
¿Por qué no hacemos nada, solo mirar por televisión, como una noticia más, sin pensar en que tanta contaminación nos afecta a todos?
¿Por qué no vemos un poco más allá de nuestro propio horizonte y nos imaginamos un futuro sin agua, sin peces, sin aire puro para respirar, sin árboles, sin pájaros, en un mundo sombrío y deshabitado?

No se trata de hacer profecías apocalípticas, se trata de una realidad cada vez más cercana y a la que curiosamente no le damos la trascendencia que deberíamos, por el bien de todos nosotros y por el futuro que le dejaremos a las generaciones venideras.

1 comentario:

  1. basta de plataformas marinas....son un peligro mundial...peor que cualquier otra cosa en el mundo...

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